El nuevo espectáculo del timplista lanzaroteño Benito Cabrera, ‘Constelación’, será presentado el sábado, día 7 de noviembre, a las 20.30 horas, en el Auditorio de Teror. La propuesta de Cabrera, que se acompaña de Tomás Fariña (guitarra), y Sergio García (voz y percusión), constituye una peculiar y espectacular aportación sonora del cielo contemplado desde Canarias, en el que aúna la belleza de melodías canarias e imágenes del cosmos.

Benito Cabrera

¿Qué podrá disfrutar el público que vaya a ver ‘Constelación’ al Auditorio de Teror?

‘Constelación’ es un paseo por el Cosmos, por sus imágenes y sonidos, con un fondo de música vinculada a la realidad canaria, pero no estrictamente tradicional.

¿Cuántos temas musicales componen el repertorio que interpretarás en el citado montaje?

Son trece temas. En ellos hay desde una danza renacentista hasta un tema de The Beatles.

¿Qué importancia cobran los audiovisuales o elementos complementarios a la música en esta nueva propuesta tuya?

Los audiovisuales son de gran importancia. La belleza del cosmos ha podido plasmarse en las últimas décadas gracias a los avances técnicos, que posibilitan su plasmación desde un punto de vista que trasciende lo científico, para ofrecernos algo que es puro arte. En particular, la visión desde Canarias es especialmente espectacular, gracias al magnífico cielo que tenemos. Prueba de ello es los premios internacionales que ha ganado Daniel López, un canario que ha mostrado nuestro cielo de una forma sorprendente, a través de sus trabajos en time-lapse.

¿Es quizás el proyecto más experimental o novedoso que hayas afrontado hasta la fecha?

Puede ser, aunque no es el más arriesgado que he hecho. En cualquier caso, me gusta explorar nuevas formas de expresar mi manera de entender la música y la cultura, que tiene que ver con un sentido global y multi-disciplinar.

Los soportes imagino que complementan el valor de la música en directo. ¿Ha sido complicado el diseño conceptual de esta propuesta de cara a que el público entienda la oferta en su conjunto, como un todo unitario?

Claro, ésa es la idea. Básicamente, es invitar al espectador, a los canarios en general, a un sentido trascendente y hermoso de nuestra existencia, dentro de un marco mucho más global que nuestras queridas islas. La idea es que -de forma literal- podemos sentirnos universales desde aquí.

Los últimos datos sobre el apego del público de Canarias hacia la Cultura no nos deja precisamente como comunidad en una buena posición con respecto a otras comunidades. Cómo crees que se puede mitigar paulatinamente ese desinterés? Es sólo misión de las instituciones públicas? Hace falta un gran pacto por la Cultura en Canarias?

Es responsabilidad de todos: las instituciones, las familias, los enseñantes, los agentes culturales… Lo que no podemos es quedarnos impasibles ante una realidad tan poco alentadora. Hace falta, sobre todo, criterio, planificación, gestión responsable y dotación de recursos. La norma de improvisar y el concepto de considerar la cultura como una actividad veleidosa es una triste norma en los responsables políticos. Pero también lo es por parte de las familias, que no educan a sus hijos más allá de la cultura televisiva. Vivimos en un país en el que los héroes van en pantalón corto y corren detrás de una pelota, o dicen estupideces para una audiencia idiotizada. Ante eso, sólo cabe educar.

Creo haberte entendido en alguna entrevista que el timple ha cumplido su mayoría de edad. ¿Cuál crees que puede ser entonces su gran reto de futuro como instrumento?

Digamos que ha superado al menos su infancia. Está en su juventud, pero hay que seguir creciendo. Los retos más inmediatos podrían ser generar más literatura musical de altura, así como su incorporación en los planes del Conservatorio, al menos en un grado medio.

¿Cuánto tiempo llevas circuitando con ‘Constelación’ por los escenarios de Canarias y dónde será presentado próximamente?

‘Constelación’ es una propuesta totalmente nueva. Se estrenó hace unos meses y apenas ha sido representado. La idea es moverlo hasta finales del próximo 2016.

¿Cómo ha sido tu colaboración con el IAC?

El personal del IAC ha sido exquisitamente amable y colaborador en todo momento. Desde el asesoramiento científico hasta la cesión de imágenes, pasando por los componentes más intangibles de una relación, como la amabilidad o el ánimo constante para desarrollar el proyecto. Es un lujo que contemos con un equipo personal y profesional de tanta altura en nuestras islas.