Mientras que en Canarias tenemos a importantes personalidades, como el periodista venezolano afincado en Tenerife, Alfonso González Jerez, o el catedrático de Ciencias Políticas y de la Administración de la Universidad de La Laguna, Juan Hernández Bravo de Laguna y muchos otros, afirmando que «Canarias no dispone de materiales ni fuerza proyectiva para coagular su producción cultural» o cuestionando la existencia del talento en Canarias, en Nueva York crean la cátedra de Innovación Social de carácter pedagógico y con fines artísticos Barrios Orquestados a un proyecto cultural y pedagógico 100% canario.
Esta cátedra ha sido fundada por el Hispanic-American College de New York para el proyecto Barrios Orquestados que ha sido creado y diseñado por su director, el grancanario José Brito, ahora catedrático por esta escuela de negocios americana.
Para este buen fin, el Hispanic-American College de New York ha incorporado a una trabajadora social que se encargará de realizar en Canarias los estudios necesarios para formar el manual que permitirá exportar a otros países este innovador modelo cultural y pedagógico y que será tutorizado por el director de la mencionada nueva cátedra, José Brito. «A través de entrevistas con el entorno, la sociedad, las familias, etc. realizará estudios sociales que puedan formar un manual y guía que permita comprender a la sociedad el alcance que tiene el proyecto desde diversos inputs. Como elemento vertebrador y casi más importante de todo el proceso, se tratará de poder documentar una guía que permita trasladar el conocimiento a otros países, especialmente países en vías de desarrollo donde la infancia tenga un complejo desarrollo social», ha informado desde la propia universidad.
Barrios Orquestados es un proyecto diseñado y dirigido por el compositor, director de orquesta y profesor José Brito, hijo de una de las mentes más privilegiadas de la música y la pedagogía musical en Canarias, Don Francisco Brito, y que comenzó en un barrio de cada isla, realizando un curso piloto que fue el germen, para ir aumentando el número de barrios de manera exponencial siempre que las condiciones lo han permitido. Según el propio Brito: «Creamos unas bases de admisión donde se valora el nivel de respeto y compromiso por el proyecto por parte de cada aspirante y de sus familiares más cercanos, así como las aptitudes musicales de cada uno (no siendo este un valor excluyente en sí mismo). Todo el aprendizaje se realiza en grupo: desde la sujeción del instrumento y el aprendizaje del lenguaje musical hasta la ejecución de una partitura. La enseñanza es absolutamente gratuita. Debe ser el amor a la música y a la actividad grupal lo que les haga apreciar su permanencia en el proyecto; de lo contrario, serán relegados de ese derecho trasladando su oportunidad al siguiente aspirante de una lista de espera».
Barrios Orquestados nació desde el minuto cero con vocación internacional ya que el modelo, escrupulosamente diseñado por José Brito, es extrapolable a países en vías de desarrollo donde la infancia tenga un complejo desarrollo social.
El Hispanic-American College (HAC) es una escuela de negocios privada con sede en la ciudad de Nueva York que apuesta por la formación en habla hispana en los Estados Unidos así como en aquellos países donde mantienen acuerdos de colaboración. Sus programas tienen una vocación global que aspiran a contribuir a la mejora de la sociedad a través de la transferencia del conocimiento. El Hispanic-American College entiende que la sociedad precisa de líderes bien formados académicamente pero también en valores, por lo que su misión fundamental es lograr que sus estudiantes se conviertan en agentes de cambio y que aprendan a tener sentido crítico para poder adaptarse a los nuevos paradigmas que la sociedad les plantea. Esto lo consiguen a través de la formación académica, la formación en valores y manteniendo el foco en la innovación como parte fundamental para el desarrollo social y sostenible de las naciones.
Conclusión
Más de lo mismo. Mientras que aquí no detectamos ni valoramos nuestro talento, a nuestra gente, nuestro trabajo, son los extranjeros los primeros que lo detectan y lo apoyan. Una vez que ocurre esto, todo cristo se quiere poner la medalla.
José Brito no contó al inicio del proyecto con los apoyos que hubieran sido razonables. Primero fue la Casa Real la que se interesó por el proyecto y ahora es el Hispanic-American College de New York. Una vez ocurrido esto, a todos aquí se les llenará la boca de frases hechas tipo «desde el principio creí y apoyé esta iniciativa» o «siempre supe del éxito que alcanzaría José Brito con su proyecto».
En nombre de Canarias Cultura, y en el mío propio, queremos felicitar a todos y a cada uno de los trabajadores y personas que se han implicado desde el principio en el proyecto y que ahora reciben el justo reconocimiento y, lo más importante, el apoyo para que este modelo 100% canario, innovador y generador de cultura y bienestar social se pueda exportar a todo el mundo demostrando, una vez más, que Canarias sí tiene talento, proyectos y personas que merecen liderar iniciativas de primer orden.
En Canarias se da el síndrome de Procusto..no es que seamos incapaces de detectar talento; simplemente no interesa verlo crecer y desarrollarse y no solo se da en el ámbito cultural, por desgracia forma parte del ADN de la sociedad canaria, en especial en quienes ocupan poltronas y cargos que no quieren soltar y favoreciendo a mediocridades y amistades. Así nos va. Me alegra que ese síndrome no afecte a quienes si apuestan por el talento isleño y dan una bofetada sin mano a nos Procustianos.Saludos.